Es un Beat em' up lineal en el que puedes elegir entre tres personajes. El manejo de cada uno es muy similar entre sí, con poca o ninguna variedad entre roles.

En la última dificultad acabas haciendo siempre el mismo tipo de ataques de tumbar al enemigo y darle 300 golpes en el suelo hasta acabar con él. Así hasta que acaba el juego. Los jefes de las zonas tienen movimientos muy similares, con poca o ninguna variedad entre ataques.

Los gráficos son bonitos y las animaciones fluidas. Pero dista mucho de la franquicia Sacred como para estar relacionado con los anteriores juegos.

Juego superficial con poca o ninguna profundidad. Lo jugué en cooperativo y tuvimos que forzarnos a acabarlo a pesar de lo corto que es.

Juego con características de control muy similares al anterior. Pero no está a la altura. La ambientación es mucho más pobre. La cámara es insufrible. El control es torpe. El doblaje difícil de aguantar. La interfaz deja bastante que desear porque no parece que case con el juego. Errores (bugs)...

Como puntos a favor: Blind Guardian; y que la personalización de habilidades y la evolución de los estados del personaje enganchan bastante.

Con mods se hace bastante jugable pero el juego base tiene muchos fallos a pesar de ser un género que me encanta.