La música es excelsa. La historia empieza de 10 y se acaba deshinchando bastante (principalmente tras el combate contra Bahamut). Los personajes son bastante buenos (salvo Joshua, por algún motivo él me cayó mal). Sin embargo, centraré toda la reseña en el combate:
El sistema de combate es, inicialmente, muy interesante. Me preocupó haber desbloqueado prácticamente el moveset completo de Clive durante la demo, pero pensé que en el juego final añadirían nuevos poderes/habilidades. Esto es una verdad a medias. Cada Eikon amplia las capacidades de combate de Clive, pero no me parece suficiente. Básicamente otorgan acceso a 2 ataques y 1 habilidad especial que puede ser un gancho, un escudo, las alas de Bahamut, etc. El problema recae en que el arsenal de Clive no cambia con el Eikon equipado, haciendo que solo uses la espada durante todo el juego. Para colmo, no existe combo alguno con este arma. Solo se pueden hacer básicos, invuir la espada en llamas y lanzar hechizos genéricos que solo se distinguen en su color. Siendo un juego Hack and Slash uno se esperaría variedad de armas y combos. Aquí es donde debían haber entrado los Eikon, otorgando cada uno un arma de Clive (algo así como hace Odín con su sable). Cada una de estas armas tendrían un combo propio. Básicamente, lo que propongo es algo muy similar a la mecánica de Transformación de la Llave Espada de Kingdom Hearts III. Para quien no lo sepa, en este título el protagonista también tiene un combo básico genérico, pero mientras se progresa obtiene nuevas Llaves Espada que puede transformar en armas como lanzas o martillos. Cada una de estas transformaciones tiene habilidades y habilidades propias. Como expuse anteriormente, es pensar en Odín y extrapolarlo al resto de Eikons. Esto mejoraría el problema de la variedad en el sistema de combate.