Sorprendentemente, la respuesta a "Qué pasaría si le diéramos pasta y tiempo al equipo del DD1" no es que harían un mejor juego. DD2 es un mundo abierto de puta madre con por algún motivo menos bichos rondando que en el primero, con unas clases más limitadas y con un """Post - game""" peor, aunque donde el primero brillaba en las últimas horas siendo el resto normalillo, aquí hay un juego consistentemente bueno que intenta una jugada similar al primero tirando las cosas raras de cara al endgame y no llega a alcanzar esos niveles tan altos.

A falta de DLC (que lo tendrá), es cuestión de cambiar unos defectos por otros, es una secuela muy sólida y con mucho respeto al original, pero se le escapa la grandeza al solo arreglar las partes más truchas del original sin meterle el boost a muerte a todo lo bueno que tenia.


Los parches son tan largos que ya los entiendo cómo algo diferente así que es lo que toca. Tiene dos partes muy separadas, un post - shadowbringers que está casi tan de puta madre como la historia de base si consigues perdonarle la perdida de tiempo de las gestiones microeconómicas de todo lo que dejas atrás, y un pre - endwalker que no es que sea malo pero sufre de una decisión narrativa extraña en la que el guionista se pensó que el nudo de la historia que es shadowbringers estaba tan de puta madre (que lo está) que necesitaba también ser desenlace, dejando en un puesto raro al desenlace de verdad al que le queda lo menos interesante que desenlazar, aunque habrá que ver por dónde tira Endwalker antes de quejarme.

Shadowbringers es de lejísimos la mejor expansión del juego y el motivo principal de pedir que esto sea un RPG normal porque a partir de aquí se han escapado de las expectativas normales de un MMO, ahora solo queda la confianza ciega de que la brillantez siga en el final final y en las vacaciones de verano post final final porque nada acaba y siempre hay más twinks que reclutar en el horizonte.

Llevo ya más de 300 horas con el XIV, y si bien todas las partes hasta ahora me han encantado (algunas más que otras), si que es verdad que tenías que ponerle detrás el "para ser un MMORPG" cuándo se lo intentabas vender a alguien. Shadowbringers es muchas cosas, y entre ellas es el claro final de eso, es el momento dónde el juego se justifica por haberte hecho dar mil vueltas y por haberte comido tramas alargadas de forma cuestionable, y la justificación es que básicamente te vas a joder y vas a llorar.
Es increíble lo altísimo que llega la trama principal, lo integrado que está todo desde el principio y lo muchísimo que eleva el conflicto el tener tantísimo camino a tus espaldas. Toda la trama es cojonuda ya desde el concepto, pero las ultimas 3 horas son algo magistral al nivel de lo mejorcito que haya dado la saga.

En definitiva, que auto - causarte síndrome de Estocolmo está de puta madre porque te llevas peak fiction con personajes bonicos, eso y Soken eres lo putisimo superior ojala compongas el tema de mi funeral.

Es el Demons Souls de Bloodborne, hecho después y por otra compañía, lo que es el mayor halago y la mayor crítica que puedes darle al juego. El setting de Pinocho pero grimdark se vende solo y el combate pillando parrys del Sekiro pero metiendolos en un sistema de combate con opciones variables es cremísima, pero lo primero se va un poco al carajo por el hecho de que vayas de fábrica a calle y de calle a fábrica y a lo segundo le pasa lo habitual del género estos últimos años, que degenera hasta meterte con bichos incomprensibles con un ratio de hostia/segundo por encima de lo legal.

Por suerte para este juego, picor de Bloodborne hay siempre y es de lo poco que consigue rascarlo.


Recontraputisima marioneta sin nombre hija de la gran pu-

En medio de probablemente el peor momento en las últimas décadas para la industria del videojuego, Hi-Fi Rush se alza entre toda la mierda haciendo algo increiblemente dificil, ser un juego de la PS2.

Es absolutamente increible que "equipo de desarrolladores con talento haciendo algo que les salga del alma y sea divertido" no se haya convertido en el molde para hacer videojuegos, supongo que porque proporciona un 2.7% menos de beneficio, pero aquí ha pasado, y el resultado es un juegazo de 9 horas como mucho donde te das de hostias al ritmo hasta que ve que dejaria de ser divertido si siguieras y entonces se acaba, y además se permite el lujazo de poner a parir al corporativismo de la industria en el proceso, si eso no es un juego de diez no se lo que lo será.

(No lo es, too much plataformeo)

Es un juego gracioso porque salió hace 10 años y puedes notar que hizo tanto daño al orgullo de Nintendo que simplemente pararon de hacer Marios 2D hasta que tuvieran el Wonder para competir (y seguir perdiendo miserablemente). Si el primero de Retro ya era bueno, aquí se la sacan del todo para hacer un plataformas dónde cada nivel es todo lo que podría ser y más, que te pone a prueba desde el principio y que te tira bosses terribles de 5 minutos a la cara porque asume que no eres subnormal y sabes saltarle más de 3 veces a alguien en la cabeza.

10/10 y eso que ni siquiera he empezado a hablar del modo Funky.

Persona 3 ya era el mejor Persona hasta cuando era un juego que te odiaba y se dejaba jugar lo justito, si ahora añades al terrorismo emocional de antes el que me lo pase bien jugando, compararlo con el resto es algo ilegal.

Es un juego puro y consistente como el solo, donde todo en él, sean mecánicas, relaciones o (en el remake algo menos) estilo visual, existe para transmitirte un mensaje, que vas a palmar y que cada día y con quien lo compartes es especial, y aunque sea el mensaje más manido y sobreutilizado de la narrativa japonesa, el prisma del que se mira aquí es diferente, siempre desde el optimismo y desde la perspectiva de que todo lo que hagas puede mejorar la vida de la gente a la que quieres, y de que toda vida, dure lo que dure, es bonita y merece ser vivida.

En fin, 10/10 would cry again, nos vemos en 10 años cuando Atlus saque la obra de teatro y me deshidrate al primer acorde de Memories of You.

Si hay algo que odie más que un RPG occidental es DyD, así que que me haya gustado esto debe suponer el fin de los tiempos. Cómo buen weeb que soy, sin la promesa de matar a Dios solo he mantenido la concentración durante 40 horas para acabármelo petandome las 10 side quests diferentes donde te puedes follar a un oso, y aunque brille en personajes secundarios y la historia sea casi siempre interesante, el combate es cansino y solo se dedica a sacar el 5 raspado que necesita para tirar adelante, aunque supongo que hay un limite a lo interesante que puedes hacer tirar daditos.

He empezado por aquí porque como buen fan de Kingdom Hearts no se contar. Está de súper puta madre y el único problema es que igual la historia es demasiado pepinazo para un juego donde puedes manejar un puticlub y hacer que un pollo te haga la declaración de la renta, a veces es dificil parar de seguirla para ponerte a hacer el capullo.

Un juego muy valiente, pero que nunca acaba de confiar completamente en todo lo nuevo que está haciendo y tiene que meter cositas de juego normal entre medias como disparitos y ballenas voladoras que en realidad representan tu miedo a la paternidad

Un Sonic de más de 20 horas hecho a base de tirar cosas contra una pared a ver qué queda pegado, es experimental cómo él solo y falla en mil cosas, pero lo que funciona es tan divertido que les perdonas las compras en la tienda de assets de Unity

Un Mario que me deja saltar doble y tirar ganchos es claramente el mejor, pero aunque haya despliegue de creatividad en las maravillas, se me deshincha mucho si el juego usa 2 jefes puestos en aleatorio para todos los mundos

Roto como él solo y capaz de petar 4 veces en hora y media, si consigues dejar atras bugs, peores controles que un juego de la 64 y el escuchar Johnny Guitar 50 veces, hay un pepinazo de guión lleno de opciones, pero cuesta decir que merezca la pena

Brilla por encima de sus muchisimas capas de recortes de presupuesto y desastre gracias a una visión de lo que quiere ser fuertísima, siempre a favor de darle más dinero a juegos que me permiten inmolarme para extra damages